
Acepta degradación a #2 de grupo español
Ángel Carromero, el político español que causó la muerte a dos cubanos hace 15 meses, recibió un espaldarazo del Partido Popular el sábado 26 al ser nombrado Secretario General de Nuevas Generaciones, la filial juvenil del PP.
En un cambio de guardia claramente cosmético, Carromero abandonó su título de presidente de Nuevas Generaciones y asumió el segundo puesto, una movida obviamente tomada para salvar la cara en vista del grave percance que él causó en Cuba el año pasado.
El sábado, Carromero designó a una joven sucesora, la concejal Ana Isabel Pérez, como presidenta de NNGG y pasó a ser el poder detrás del trono. El diario español Estrella Digital, que reportó la noticia, dice que Carromero “dejó todo bien atado” y que Pérez es solamente “un delfín” – una marioneta – “para seguir controlando el aparato”.
“Lo cierto es que su nuevo puesto le otorga poder [a Carromero] y mantiene la influencia de [Esperanza] Aguirre sobre Nuevas Generaciones”, analiza Estrella Digital. El enroque cuenta con el apoyo y beneplácito de Aguirre, presidenta de la Comunidad [provincia autónoma] de Madrid, cuyo fuerte control sobre el PP y NNGG es bien conocido.
En julio de 2012, Carromero viajó a Cuba para entregar dinero e instrucciones a grupos oposicionistas de parte del PP, el partido derechista gobernante en España. Durante un viaje en automóvil al oriente de la isla, en compañía de un colega sueco y dos oposicionistas cubanos ñ Oswaldo Payá y Harold Cepero -Carromero condujo el vehículo a velocidad tal que salió de la carretera y se estrelló contra un árbol.
Los dos cubanos murieron. Carromero y el activista político sueco, Jens Aron Modig, sufrieron heridas leves. Carromero fue enjuiciado, convicto de homicidio imprudente y sentenciado a cuatro años de prisión, que está cumpliendo en España gracias a un convenio entre ese país y Cuba.
En agosto pasado, Carromero dijo que el accidente fue causado por otro vehículos que empujó al suyo fuera de la carretera, pero no dió pruebas de esa explicación.
Se da, entonces, el caso de un convicto que, de facto, dirige una importante filial del partido gobernante en España. Hace unos meses, fue nombrado asesor municipal del Ayuntamiento de Madrid. Actualmente se encuentra en libertad condicional con pulsera electrónica.
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